En los años 90, Kate Fisher fue una de las modelos más exitosas a nivel mundial.
Desde sus primeros días en el mundo del modelaje, Kate Fisher, quien ya no responde a ese nombre, estaba destinada a una gran carrera como supermodelo. Tenía cuatro portadas en Vogue, actuó en una película con Hugh Grant e incluso tuvo una relación con el multimillonario James Packer.
Sin embargo, los últimos años trajeron cambios significativos a la vida de esta estrella australiana. Su estilo de vida habitual cambió por completo. Ya no es la hermosa y delgada chica que una vez fue, y se alejó del mundo del modelaje, aparentemente para siempre.
Kate Fisher comenzó su carrera como modelo a una edad temprana y rápidamente se convirtió en una de las modelos más exitosas y reconocidas en Australia. Tenía solo 14 años cuando su belleza y talento fueron notados, y desde entonces, apareció en las portadas de varias revistas de moda.
Su relación con el multimillonario James Packer comenzó a mediados de los 90. La pareja salió durante 5 años completos e incluso estuvieron comprometidos durante 2 de esos años.
En 1998, Kate Fisher y James Packer anunciaron su ruptura. Después de la separación, la modelo reunió todos los costosos regalos valorados en 500,000 dólares que su ex amante le había dado y los arrojó al océano. Kate culpó a los amigos de James por la ruptura de su relación.
Más tarde, se mudó a Los Ángeles y comenzó un romance con un hombre de negocios que le sugirió invertir su dinero en un negocio rentable. Sin embargo, este prometido resultó ser un estafador que gastó todos sus ahorros. Además, tenía una esposa y un hijo que no le había mencionado a Kate.
Después de tal engaño, Kate Fisher regresó a Australia y se encontró casi sin medios para mantenerse. Recibió ayuda de una organización benéfica y vivió en un refugio para mujeres solteras durante un tiempo. Durante muchos años, se negó a ver siquiera a sus padres y prefirió una vida en una pequeña habitación en el refugio para personas sin hogar, ahogando sus penas.
Después de estos eventos, encontró consuelo en el judaísmo ortodoxo. Esta fe la inspiró a cambiar su nombre, y ahora se hace llamar Zipporah Malka. Su nuevo nombre lleva un significado profundo y es un tributo a su abuela judía, siguiendo una tradición transmitida a la nieta mayor.
Hoy en día, la ex modelo se niega firmemente a responder a su antiguo nombre «Kate» e incluso a los apodos «Zip» o «Zippy». Esto es algo serio para ella y está lista para defender su nuevo nombre y fe ante aquellos que se toman libertades.
Zipporah ha encontrado una nueva vocación. Trabaja como cuidadora de personas mayores, brindándoles cuidado y apoyo.
Durante varios años, la ex modelo permaneció fuera del ojo público, pero los periodistas de repente hicieron una sensación de ella, capturando los cambios radicales en su apariencia. Y Zipporah Malka participó en una sesión de fotos para una revista de mujeres con un atuendo médico. Luego participó en otra sesión de fotos con un atuendo muy revelador para una revista competidora, demostrando que no tiene intención de esconderse.